EL GOLPE DIARIO
La aurora precede un nuevo día
y las aves entonan sus melodías,
es cuando estoy en pie nuevamente
en medio del acontecer naciente,
dispuesto a fajarme sin falla
en una desigual batalla.
Soy un átomo que enfrenta,
designios que me están envolviendo
evidentemente, admito que en forma lenta
inexorablemente me está demoliendo.
Entusiasmado al empezar de nuevo
en el Dios de Jacob mi fe renuevo.
Inicio el desigual encuentro,
lanzando mis mejores golpes
siendo consciente de lo que enfrento,
sigo guapeando con esquives torpes.
De arremeter con coraje y decisión,
mis miembros se cansan de tanta presión
el levantar los brazos me cuesta,
mis manos se empiezan a entumecer
encajo brutal golpe, como respuesta
mi humanidad siente desfallecer.
Abrumado, parece venir la noche
no obstante el generoso derroche,
pues... el último golpe me derribó.
Aturdido me estoy levantando
el rival, una y otra vez está golpeando
es implacable, que a nada atino
¿Qué me deparará el destino?
Quiero eludir los golpes, agazapado
pero es rápido y despiadado
mi cerebro se conmociona,
mis ojos, inflamados, se nublan
la desesperación emociona,
cuando mis piernas se doblan
después, al comenzar a jadear
escucho la campana sonar.
La batalla ha terminado
el día, no pudo ser más agitado
hoy, cumpliré con mis hijos
en la jornada que Dios bendijo.
Mañana, al despertar de la aurora
cuando las aves trinen sus melodías,
el acontecer me recordará que ya es hora
de estar en pie nuevamente,...
en el cuadrilátero de la vida.
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SERNUMAR / TRUJILLO-PERÚ
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En homenaje a todos los trabajadores del mundo, que se ganan el pan cotidiano
con el sudor de sus frentes, en condiciones difíciles.