CUARTITO DE ESTUDIO
No abran la puerta del estudio,
¡Por favor!... no forzar el encierro;
¡está atascada! presiento que es el preludio;
el génesis anunciado de mi destierro.
Mis lágrimas atascaron la puerta
del cuartito de estudio con templanza,
y se resisten en salir porque muerta;
yace adentro, bajo sombras, la esperanza.
¡Oh, cuartito de estudio! confidente
bastión de mi refugio y fortaleza;
fuiste mudo testigo, valiente,
de incontables alegrías y tristezas.
¡Oh, cuartito de estudio! esperanza mustia
bastión de mi refugio y morada,
fuiste mudo testigo de mi angustia,
las veces que imploré al Dios de la alborada.
Cual sentenciado al borde del cadalso,
las lágrimas que vertí fue inadmisible,
inundó el cuartito de estudio, ¡lo embalsó!
lo llenó, aferrándose a lo imposible.
No abran la puerta del estudio ¡Por favor!
Que de hacerlo será abrir mi herida,
el torrente lagrimal no les causará pavor;
es diáfano manantial ¡Es mi vida!
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SERNUMAR / TRUJILLO - PERÚ
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