TARDE  TRISTE

Era una de mis tardes más tristes, que prefiero olvidar

Cuando en la tristeza de aquella tarde, me acordé de ella 

Busqué arrancarle una sonrisa, una palabra amable

Que me hiciera renacer y sentir invulnerable.

Le envié una linda rosa y también una mascota virtual

Para divertir su alma, pretendiendo ganar su atención

La respuesta fue lacerante, quebró mi estado emocional

No quiero más tardes tristes, que resigne al corazón.

SERNUMAR - 03/08/2015